A dos años del #8A
*Por Virginia Peyrás Villarino (docentes de AyL)
Una rebelión de mujeres en todo el mundo comenzó a exigir un cambio a este sistema patriarcal. En Argentina, empezó con el Ni Una Menos, una movilización enorme de mujeres y disidencias, desde abajo y autoconvocada que fue creciendo hasta lograr imponer el debate sobre el aborto en la sociedad y luego, también, el tratamiento de la ley en las cámaras de diputados y senadores.
Ese 8 de agosto de 2018, luego de arrancarle media sanción a los diputados, miles y miles nos movilizamos hacia la puerta del congreso en CABA y salimos a las calles en todo el país. exigiendo aborto legal, a pesar de la lluvia y sabiendo que nos lo iban a negar. Los senadores violentaron nuestra decisión porque nosotrxs ya habíamos decidido, habíamos ganado la opinión pública y el debate en la sociedad, y estábamos ahí afuera demostrándolo. Votar en contra fue legitimar la clandestinidad. Ese día, la dirigencia de este país (supuestamente nuestros representantes) puso en evidencia que el senado es una institución antidemocrática, que no escucha las exigencias del pueblo, que sigue reproduciendo y reafirmando la explotación patriarcal y capitalista.
A dos años de esa movilización inmensa y autoconvocada la legalización del aborto sigue sin salir aunque nos hayan intentado convencer de que con cambiar la integración del senado alcanzaría, de que debíamos votar mejor. Pero sabemos, porque lo vivimos en nuestros cuerpos, que nuestros derechos se ganan en las calles y no dentro de esos recintos. Tenemos que seguir organizándonos y autoconvocándonos para que el aborto sea ley.