Sigamos luchando desde abajo por aborto legal

*Por Marta Martínez (diputada de AyL)
El 28 de septiembre es un día en la agenda feminista en el que se celebra la lucha por la Despenalización y Legalización del aborto en América Latina y el Caribe. Las feministas históricas nos han enseñado mucho sobre esta lucha que lleva muchos años, en los que no han bajado los brazos aunque la dirigencia política y gran parte de la sociedad les diera la espalda. Esto cambió sin dudas con el proceso de rebelión que estamos protagonizando las mujeres y disidencias desde aquel Ni Una Menos que comenzó contra los femicidios y continuó con una fuerte denuncia a las violencias sobre las mujeres, la necesidad de Educación Sexual Integral y la legalización del aborto. En 2018, tres años después de aquel multitudinario Ni Una Menos las mujeres y disidencias protagonizamos una marea verde que logró imponer al Congreso la discusión sobre a legalización del aborto. El pañuelazo de febrero de 2018 fue clave en la visibilización de esta exigencia por parte del colectivo de mujeres que habían comenzado su militancia con el NUM junto con aquellas feministas históricas y militantes políticas y sociales. La marea verde tomó, entonces, el elemento más valioso que nos ha mostrado la rebelión feminista: con las manos desatadas, autoconvocándose, cientos de miles tomaron las calles. La exigencia estaba clara: BASTA DE MUJERES MUERTAS POR ABORTOS CLANDESTINOS. Cada unx de quienes sostuvieron esta exigencia llevaron el debate a sus casas, a sus círculos de amigxs, a sus compañerxs de estudio, a muchos espacios donde antes hubiese sido muy difícil llegar. Algo había cambiado: ya no era un tema del que no se hablara, cada compañerx llevó el debate adelante, por abajo, con distintos argumentos que concluían en la necesidad de que el aborto fuera legal. Sin embargo, a pesar de la exigencia de gran parte de la población, el Congreso patriarcal nos dijo NO, manteniendo al aborto en la clandestinidad lo que tiene como consecuencia que las mujeres sigan muriendo, sobre todo las mujeres pobres.
El presidente de la Nación Alberto Fernández dijo este 28S que “la penalización del aborto ha fracasado como política. Mueren mujeres por abortos clandestinos y otras sufren graves secuelas en su salud”. Sin embargo, teniendo todas las facultades para impulsar su aprobación no lo ha hecho desde que asumió. Es evidente que la dirigencia política siempre aprovecha las circunstancias, y se mueve delicadamente al son de la conveniencia propia y partidaria así como lo hizo Mauricio Macri quien puso a debate el proyecto en el Congreso pero al mismo tiempo se reunía con los denominados “celestes” representantes de las Iglesias en contra del derecho a decidir de las mujeres. La única forma en la que lograremos que se apruebe es si está en manos de la población, no dependiendo de la dirigencia política, tenemos que seguir exigiendo de todas las formas posible su aprobación, con el ejemplo de la rebelión feminista y la marea verde.
Desde el bloque de AyL en la Legislatura porteña, el 28S firmamos la Declaración de la Campaña por el aborto legal para exigir ABORTO LEGAL YA, que es la exigencia que sigue manteniendo toda la rebelión feminista también en tiempos de pandemia donde la necesidad de la legalización ya es urgente. Como hace dos años, seguimos luchando junto a la rebelión feminista para arrancarle al Congreso nuestro derecho. Solamente peleando todas juntas desde abajo en contra de estas instituciones patriarcales podremos arrancarles nuestro derecho al aborto legal, seguro y gratuito.