Van a intentar un ajuste histórico: preparemos una lucha histórica

*Por Docentes de AyL
La disputa entre Fernández y Larreta por la coparticipación ya tiene un carácter nacional. En el marco de esa discusión, el pasado 13 de diciembre, Diego Santilli, el vice de Larreta, dijo que “se acabaron las grandes obras en la Ciudad” por la reducción en la coparticipación, la cual, según el mismísimo Larreta, equivale a la construcción de 217 escuelas. Para comprender la frase de Santilli, habría que empezar por interpretarla: siendo que estamos ante un gobierno que no construyó las 217 ni siquiera teniendo los fondos y que no cumplió ni con el 10% de su promesa de campaña de los 10 km de subte por año, resulta evidente que no hay ninguna “gran obra” que esperar, ni con los fondos ni sin los fondos.
Cuando el gobierno dice que “se acabaron las grandes obras”, se refiere a que se acabaron prácticamente todas y cada una de las obras. Y también anuncia que el ajuste no va a ser solamente en la obra pública: tenemos que prepararnos para un ajuste sin precedentes en la Ciudad de Buenos Aires (aún con los nefastos antecedentes del macrismo) y, por ende, tenemos que prepararnos para que el gobierno intente un ajuste feroz en la paritaria docente. Y esto para no hablar de la enorme pérdida salarial que tuvimos desde que empezó la pandemia…
Para completar el panorama, nada mejor podemos esperar de la paritaria nacional: no nos sirvió ni siquiera para apaciguar el ajuste al salario docente en 2020 y menos podemos esperar del 2021, un año en el que la paritaria docente puede ser la paritaria testigo del pacto de ajuste de Alberto Fernández y el FMI, que al parecer se firmaría en marzo o abril.
Este panorama nos empuja a responder de una forma notoriamente distinta a la que venimos reaccionando los últimos años. La única forma de derrotar el ajuste histórico de Larreta en el marco del acuerdo de Fernández con el FMI es con una pelea histórica, y hay una sola forma de dar una pelea histórica: lxs docentes tenemos que dejar de ser simplemente lxs que “acatamos” los paros de UTE o Ademys, tenemos que organizarnos para que las medidas de lucha las decidamos nosotrxs en las escuelas y que sean los sindicatos los que “acaten” las decisiones de lxs trabajadorxs de la educación. Si nos organizamos para decidir en todas las escuelas y damos la pelea para que los gremios no decidan por lxs docentes, podemos dar la lucha histórica que necesitamos para derrotar el ajuste de los gobiernos y el FMI.