La cuarentena profundiza la desigualdad

*Por Virginia Peyrás (docentes de AyL)
La cuarentena y el funcionamiento de las escuelas a la distancia pone en evidencia las desigualdades preexistentes y las agudiza. Mientras en las escuelas privadas lxs estudiantes deben conectarse a clases por plataformas de videollamada, en la mayoría de las escuelas públicas esto se vuelve imposible porque lxs estudiantes no tienen acceso a internet y mucho menos a computadoras.
Creíamos que nuestrxs estudiantes eran nativos digitales que conocían la tecnología mejor que nosotrxs, nos hablaron de la importancia de las TICs para enseñar a las nuevas generaciones y nos encontramos con estudiantes que no saben lo que es un mail, cómo usar el word, que casi no tiene computadora y se manejan por el celular. Quizás saben cómo usar las redes y jugar jueguitos, pero nos encontramos en este contexto aprendiendo nosotrxs a usar plataformas que nunca habíamos pensado en usar e intentando explicarles a ellxs cómo usarlas, intentando amoldarnos a las diferencias para no dejar a ningunx excluídx aún más de esta nueva manera de enseñar. La mayoría se maneja con el celular, hace las tareas en la carpeta y le saca fotos con el celular, las fotos en general están movidas, nuestrxs estudiantes manifiestan que tiene que compartir una computadora con varixs integrantes de su familia, que tienen la pantalla del celular rota y no pueden leer textos muy largos, que no tienen memoria en el celular para bajar apps, que tienen que cargar crédito para poder mandarte los trabajos prácticos.
Me tomé el trabajo de relevar en mis estudiantes cuáles eran sus situaciones particulares para poder desde allí planificar mis clases, pregunté si era posible que vieran una película si se las pasaba, en ninguno de mis 7 cursos de escuelas de Boedo, Almagro y Once (CABA) tuve una respuesta unánime afirmativa, en ninguno de mis cursos logré que todxs mis estudiantes se unieran a un classroom, en ninguno de mis cursos logré que todxs puedan acceder a las tareas aunque sean tan solo en formato pdf, en ninguno de mis cursos fue posible realizar una videollamada con ni siquiera un 70% de estudiantes. Esto no quiere decir que unx no esté en contacto con ellxs, podemos enviarles mensajes de Whatsapp y preguntarles cómo están, una tarea que se ha vuelto importantísima.
Larreta dice que el 90% de lxs estudiantes está conectado, me pregunto ¿a qué situación se refiere? ¿Al hecho de que sabemos que están ahí aunque no puedan acceder a ninguna de estas modalidades señaladas anteriormente? Sigue sin garantizar netbooks para estudiantes ni docentes, sigue sin garantizar internet o cualquier otro material que fuese necesario.
¿Vamos a dejar que esta diferencia se acentúe? Organicémonos por escuela para exigir por todas estas problemáticas invisibilizadas.